«La inflación total en agosto se situó en 10,8 %, por encima del 9,9 % anual esperado por el equipo técnico del Banco. La inflación básica (sin alimentos ni regulados) mantuvo una tendencia creciente superior a la estimada y alcanzó el 6,9% anual en dicho mes», explicó Leonardo Villar, el gerente del Banrep.
Colombia, no es el único país que atraviesa el fenómeno, esto se ha convertido en algo a nivel mundial, donde los índices de inflación y aumento de tasas de interés están fuera de control en la mayoría de los países.
En la coyuntura actual de aumento de precios e inflación, puede aplicarse diferentes estrategias de mitigación de impacto, como es el hecho de tener liquidez disponible para realizar pagos de contado, así asegurar los precios de las materias primas y evitar su incremento. Pagar a los proveedores de contado no solo permite obtener descuentos por pronto pago, sino también obtener un precio menor al precio que pagarían en 60 o 90 días.
Además, la posibilidad de tener operaciones de factoring de corto plazo, genera oportunidad a las empresas de controlar mejor los cambios en las tasas, ya que son operaciones que pueden desmontarse con inmediatez y evitan estar sujetos a condiciones de tasas indeseadas en el futuro.
Recibir el pago de contado de las facturas a crédito, permite a crecer los negocios, generar mayor estabilidad, flujo de caja eficiente y poder de acción. Para que las altas tasas de interés y la inflación no afecten los negocios hay que empezar a pensar diferente, actuar diferente, crear estrategias que fortalezcan, cuiden y mantengan a flotes los ingresos y egresos de las compañías.
