La lenta productividad de los puertos de la costa oeste de Estados Unidos, agravada por los conflictos laborales en curso, ha creado desafíos significativos para las empresas involucradas en el comercio internacional. Además, la sequía en el Canal de Panamá está retrasando aún más las rutas de envío. Sin embargo, en medio de estos desafíos, el financiamiento del comercio y el financiamiento de la cadena de suministro ofrecen una oportunidad única para navegar estos obstáculos y garantizar operaciones fluidas. Según datos de Marine Traffic, el valor de los 86,381 contenedores combinados que se encuentran en los puertos de Oakland, Los Ángeles y Long Beach asciende a $5.2 mil millones.
La situación laboral ha llevado a retrasos en las operaciones portuarias, lo que podría afectar la eficiencia y generar consecuencias negativas para los transportistas y los consumidores. La falta de mano de obra calificada y las disputas laborales continúan influyendo en la situación. Los expertos advierten que, si los problemas persisten, podríamos enfrentar retrasos similares a los experimentados durante la pandemia.
La congestión en los puertos de la costa oeste ha llevado a un aumento en las tarifas de envío y ha generado preocupaciones en la cadena de suministro. Según los datos proporcionados por Vizion, la tarifa de siete días para un contenedor despachado a través del Puerto de Oakland opera al 58%, mientras que en el Puerto de Long Beach es del 64% y en el Puerto de Los Ángeles es del 62%.
Así las cosas, se requiere soluciones creativas y apoyo financiero para mantener la integridad de la cadena de suministro. El financiamiento del comercio y el financiamiento de la cadena de suministro pueden proporcionar a las empresas la liquidez y flexibilidad necesarias para adaptarse a estas circunstancias.
Al aprovechar herramientas de financiamiento del comercio, como las cartas de crédito y los seguros de crédito comercial, las empresas pueden mitigar los riesgos asociados con los pagos demorados y los horarios de envío inciertos. Estas soluciones brindan seguridad financiera, lo que permite a las empresas proceder con confianza en sus transacciones de comercio internacional. Además, las instituciones de financiamiento del comercio pueden ayudar a gestionar los costos adicionales incurridos debido a las desviaciones de los puertos de la costa oeste hacia ubicaciones más confiables a lo largo de los puertos del Golfo y de la costa este.
Aprovechar estas oportunidades ayudará a las empresas a salir más fuertes y resilientes frente a las interrupciones de las cadenas de suministro.